domingo, 9 de diciembre de 2007

Y todo por miedo

como amantes invisibles, como unidos por un cordel inmaterial y fuera de tiempo y lugar, ella lo sueña y él hace el intento.
se aman en secreto y con telas sobre sus cabezas. se aman en silencio y a ciegas. se aman casi sin conocerse. porque él la quiere a ella y ella a él.
pero enredados en sus propios laberintos dialécticos, y a pesar del amor mutuo y manifestado previamente en estas líneas, encuentran la forma perfecta de mantener esa distancia entre ambos, cubriendo con el velo de la perpetuidad a un amor que pudo ser pero que resulta mejor en sueños.
porque la realidad a veces viene a estropear todos nuestros planes.
porque no todos tenemos el coraje necesario para enfrentar nuestros sueños a la rutina desalmada de un mundo que nunca espera por nosotros.

porque es más fácil ser manejado por el miedo que enfrentarlo.
y así transcurren miles de vidas semi-infelices, rengas y tuertas, cobardes, inseguras, opacas, mediocres.

y así el mundo se llena de almas de relleno. y cuesta encontrar a alguien por quien valga la pena llorar.

2 comentarios:

magdalena dijo...

wow.

empecé sintiendo esa felicidad de reconocer-se en un texto.
después vi que se me invitaba a sentirme semi-infelíz (renga ya me sentía como condición necesaria que se desprende de las primeras líneas).

después pensé.

Anónimo dijo...

ella sueña y también hace un intento...